miércoles, 20 de octubre de 2010

Buenos días




Yasujiro Ozu, Buenos días (1959)

Una de las últimas películas de uno de los directores más reconocidos en Japón.






Interesantes críticas en este enlace y aquí. Varias escenas en esta dirección, aquí y, por último, uno de sus diálogos.

3 comentarios:

  1. ¡Hola! Acabo de ver la peli y me ha gustado mucho, sobre todo (además de los niños, claro) esa escena en que la pareja espera el tren hablando, en teoría, del tiempo. Es bonito lo que dicen sin decir. Se intuye un final feliz para ellos, ¿no?...

    ResponderEliminar
  2. Es una peli entrañable aunque el día que la vi, me costó, me costó terminar. Es lenta, es costumbrista, es como el caminante (cómic japonés)... ver qué está pasando desde el otro lado.

    Pero luego, mirando hacia atrás, ves que tiene muchos detalles curiosos, muchos detalles entrañables. Es una gran película, y dice muchas cosas sin contartelas explícitamente.
    Un barrio normal, de currantes, en las afueras de una ciudad... donde tener un nuevo electrodoméstico es noticia y fuente de cotilleos para todos los vecinos por lo menos durante una semana (está ambientada en los cincuenta). Da pie a demostrar que dentro de la raza humana hay infinidad de posturas, infinidad de formas de ser... pero al mismo tiempo te das cuenta que esas diferentes actitudes son comunes en cualquier sitio del mundo. Me he sentido identificado, es decir, he visto que nuestra cultura occidental es igual que lo mostrado en la película.

    También las actitudes de los niños son autenticas. Se comportan igual que otro niño. No entiendo la de los padres pero la de los niños, veo que son muy internacionales. Los padres, no regañan a los niños... por lo menos no como aquí. Les dicen que se callen levantando la voz o bien les dicen que estan decepcionados con ellos... pero ya está. No digo que haya que ejercer siempre el castígo fisico (que en occidente y sobre todo en esa época estaba mas que normalizado dar un bofeton o más para "corregir" la actitud de alguien). Pero me da que una persona, o personita, no va a entender que las cosas que hace están mal si solo se le dice que esa actitud no me ha gustado nada, no es propio de una persona como tu. Son niños, no adultos... Algo falta en la peli sobre la educación de los niños. Como por ejemplo cuando en clase están con la huelga, el voto de silencio. Si un profe saca a un alumno a la pizarra y le hace una pregunta, si el niño se queda callado y hace un gesto raro... y sigue sin hablar... algo pasa, y no creo que tarden dos dias en avisar a casa para notificarlo, y que los padres respondan tranquilamente "Ah si! no pasa nada, que ha hecho voto de silencio".

    ResponderEliminar
  3. Da que pensar el tema que trata, si hablar para decir algo, o no hablar porque hablar por hablar, es una tontería.
    Me hizo pensar el hecho de que hablamos constantemente para decir tonterías, hablar del tiempo sin decir cosas importantes. Y de hecho, al final de la peli, los que han reconocido que tal vez los niños tengan razón por decidir hacer voto de silencio como protesta por no dejarles decir verdades como puños según su criterio infantil (el problema es que ofenden a los adultos), siguen sin hablar abiertamente, siguen en silencio y hablando del tiempo en vez de decir que se quieren, decir que ella es el amor de su vida y que quiere pasar el resto de su vida con ella. Aquí discrepo del comentario de loli, no creo que estén hablando entre líneas, sino que de forma cobarde no se dicen nada, no quieren hablar abiertamente por vergüenza, miedo...

    La posición del niño pequeño, me da un poco de pena. Está completamente eclipsado (como es normal por otro lado) por la personalidad de su hermano mayor. Cada cosa que hace, tiene que tener el visto bueno de su hermano. Si deciden romper el voto de silencio es porque el hermano mayor lo ha decidido, si tienen que enfadarse con su madre es porque el hermano mayor así lo ha dicho, si tienen que jugar, ir a casa del vecino...

    Me costó entender qué era lo de los pedos, el ruido ese... supongo que será algo parecido al "estirame del dedo" antes de lanzarse un pedo, pero no lo asociaba con una flatulencia, pero luego tiene su gracia. Y el compañero que no consigue que le salga un pedo decente y se rien de el por ello, que termina siempre cagandose en los pantalones de la fuerza que hace, eso me hizo partirme de risa si, soy un poco sencillo.

    Y sobre todo, me ha dejado boquiabierto que "radio patio" también funciona en japón. Las vecinas (obviamente, en una sociedad machista la mujer esta en casa y será la mujer la que se dedique a radiar por el patio lo que pasa): una cotilla, otra malvada, otra buena persona, otra indecisa... es tal como pasa en un patio de vecinos en cualquier otra parte del mundo.
    Y la naturaleza humana, se ve perfectamente también ahí, cuando la mas borde de todas, que va acusando a diestro y siniestro, cuando se da cuenta que el problema del dinero está en sucasa. También es curioso como funciona lo de inventarse la parte de la historia que no te sabes. Por ejemplo, hay un dinero que falta en la comunidad, y fulanita se ha comprado una lavadora: conclusion, fulanita se ha cogido el dinero y ha dicho luego que no sabe nada, es una ladrona y no te puedes fiar. Si si, yo le dejé ayer un litro de leche y ahora va diciendo que yo soy la ladrona, es mejor que le devuelvas cualquier cosa que te haya dejado o prestado, y su hijo mira mal al mio, seguro que le habla mal de mi... y suma y sigue.

    En definitiva, no es una película muy entretenida en si como divertimento, pero si que es una gran obra para una tertulia, para discutir y para ver muchos aspectos de la naturaleza humana, las diferencias y similitudes entre culturas y razas.

    ResponderEliminar